Todos en algún momento de nuestras vidas hemos querido descubrir la nueva maravilla del mundo antiguo, aquella ciudad, estatua, tumba o pintura que tras estar oculta y perdida durante siglos se revela a nuestra vista.
Y ¿Quién no ha querido echar un emocionante y directo vistazo a las obras maestras del arte?, estar cara a cara con los trabajos más significativos de los maestros más renombrados.
Un lugar ideal para cumplir en parte todos estos sueños es el excelente museo de Louvre; sería de verdad grandioso poder ir y tomarse su tiempo viendo las cosas que más llamen nuestra atención, sin molestias, sin hordas de turistas al vuelo de Tours exprés moviéndose frenéticamente por todos lados, y claro, con nuestra bebida y botana favoritas.
A nuestro sueño guajiro se anteponen varios problemas:
-El museo está en otro continente
-Tiene un horario restringido
-Jamás esta solitario o vacio
-No dejan pasar con bebidas y viandas
-Las aglomeraciones frente a las obras maestras son inmensas y no permiten el disfrute de las mismas
Pero estos problemillas no detendrán al Girito para lograr en cierta medida hacer realidad todos estos sueños:
La página web oficial del museo es una excelente fuente de información multimedia sobre las más grandes obras que alberga esta importantísima institución. (Ingles y Francés únicamente).
En la página principal del museo se presenta un guía animado vestido de azul, este guía es excepcional, ya que nos lleva a su taller de trabajo en el museo y por medio de una pantalla interactiva nos presenta una gran cantidad de contenido que apoya la exposición permanente del museo.
Este guía nos ilustra con contenidos multimedia sobre las historias detrás de los tesoros allí resguardados, todo esto por medio de animaciones flash, y por supuesto deja las páginas de contenido mas “duro” a la vista para que cualquiera que tenga la curiosidad de conocer más de la pieza en cuestión pueda hacerlo.
Toda la exposición interactiva es genial y entretenida, casi no puedes dejar de estar dándole a los links que aparecen con cada tema, es un ejemplo para el resto de los museos, y una reivindicación del espíritu de la museografía; si las piezas ya fueron extraídas de su contexto original, lo mínimo que debe hacer un museo es asegurarse de que el contenido y el conocimiento del mismo no quede dentro de sus paredes y sea puesto al alcance de la mayor cantidad de personas en el mundo, en este aspecto Louvre va a la vanguardia, y su página web es un afortunado ejemplo.
Un viaje que todo internauta debe hacer, es una oportunidad única al alcance de nuestro teclados.
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